Del uniforme oficial al vestir de lujo

Por Aline Gómez Roy.

Hace poco se dio una noticia que no se veía todos los días: la casa de moda francesa Louis Vuitton firmó un acuerdo multi-anual con el Real Madrid para vestir las plantillas masculinas y femeninas de fútbol, así como el equipo masculino de baloncesto, en sus viajes y eventos institucionales. Este convenio incluye prendas formal-wear y travel formal wear, diseñadas por Pharrell Williams, con un estilo atemporal que mezcla elegancia de sastrería, accesorios de piel, gorra marinera y equipaje personalizado. Lo novedoso es que esta vestimenta no solo será para quienes ya tradicionalmente tienen mayor visibilidad, sino que incorpora explícitamente al equipo femenil del Real Madrid en igualdad de condiciones.

Este tipo de alianzas habla de una evolución: ya no se trata sólo de quién viste los botines o los uniformes de juego, sino de cómo se construye la imagen institucional, los viajes, los actos oficiales y los entornos fuera de la cancha. Integrar al equipo femenil al mismo trato formal que al masculino envía un mensaje sobre reconocimiento, profesionalismo e igualdad.

¿Por qué es importante que grandes marcas hagan esto?

Visibilidad e igualdad simbólica

Que el equipo femenino use las mismas marcas de lujo en actos oficiales contribuye a normalizar su presencia. Representa un reconocimiento público: si las mujeres deportistas comparten la vitrina con los hombres no solo en competencias, sino también en imagen institucional, eso tiene peso para la cultura social.

Recursos y profesionalización

Estas alianzas suelen traer acceso a mejores materiales, asesoría de imagen, redes de patrocinio y visibilidad mediática. En muchos casos, las jugadoras femeniles han carecido de los mismos apoyos logísticos y de marketing que sus pares masculinos; iniciativas de este tipo ayudan a cerrar brechas.

Impulso comercial

Las marcas de lujo o moda tienen interés en mercados crecientes, y el deporte femenino es uno de ellos. A medida que generan más audiencia, más sponsors buscan asociarse. También se crean productos paralelos —ropa de viaje, accesorios, merchandising— que antes se diseñaban pensando principalmente en los hombres.

Otros casos de grandes marcas apoyando al deporte femenino

Para ver el panorama más amplio, aquí algunos ejemplos recientes o destacados:

Adidas en la Eurocopa Femenina

Adidas viste a varias selecciones nacionales femeninas con equipaciones específicas, no sólo en los partidos de juego, sino generando identidad de marca propia. Este tipo de trabajo demuestra que las marcas no solo ven al deporte femenino como “una extensión” del masculino, sino como una categoría con necesidades particulares.

Liga F de España y proveedores de uniforme femeninos

En la liga española, equipos como Real Madrid, Madrid CFF o Sevilla cuentan con convenios con Adidas, consolidando la presencia de grandes marcas en clubes femeniles, lo que fortalece la estructura y profesionalización del torneo.

Jordan Brand y su línea inspirada en el baloncesto femenino

Jordan lanzó una línea de tenis específicamente inspirada en el baloncesto femenino. Estas zapatillas fueron diseñadas teniendo en mente el estilo de juego de las jugadoras, buscando mejorar su experiencia en cancha.

Caitlin Clark y su colección con Wilson

En Estados Unidos, la basquetbolista Caitlin Clark logró una colección exclusiva de balones con Wilson, con diseños personalizados. Este caso subraya cómo atletas femeninas pueden tener productos exclusivos si la marca reconoce el valor de su identidad.

Patrocinios crecientes en ligas latinoamericanas

En México, la Liga MX Femenil ha visto un crecimiento notable de patrocinadores en los uniformes. Aunque no todos son de lujo, el apoyo comercial es clave para la sustentabilidad y el crecimiento de los equipos femeniles, que cada vez tienen más productos y campañas propias.

Retos que quedan

Aunque hay avances significativos, todavía existen retos:

Desigualdad en márgenes de patrocinio: Los contratos para equipos femeninos aún tienden a ser más modestos.

Visibilidad mediática diferencial: Más allá del patrocinio, lo que importa también es qué tan seguido se muestran esos uniformes y qué tanto alcance tienen los torneos.

Diseño pensado para mujeres: Aún existen marcas que ofrecen versiones femeninas simplemente escaladas desde tallas masculinas, sin considerar anatomía, comodidad o estilo.

Acceso a productos de calidad off-field: Que las jugadoras tengan acceso real a la ropa institucional, de viaje o formal, no sólo como “imagen pública” sino como parte de su equipamiento profesional.

Conclusión

El anuncio de que Louis Vuitton vestirá también al Real Madrid femenino en sus eventos institucionales no es sólo un golpe de marketing. Es un reflejo de que las estructuras deportivas más grandes están reconociendo esta demanda de igualdad, integrando a las mujeres no como un añadido, sino como parte esencial de su identidad. Si bien aún quedan retos por delante —igualdad en patrocinio, en diseño, en visibilidad— este tipo de alianzas abren caminos. Y en ese espejo, otras marcas también deben asumir su papel: no solo para aprovechar un mercado creciente, sino para construir cultura deportiva más equitativa.

La copita de la semana

  • Freixenet Italian Rosé
  • Uvas:  Glera
  • Región: Veneto, Italia
  • Vista: Rosa pálido con destellos brillantes.
  • Nariz: Sutil aroma perfumado
  • Boca: Delicado toque de cerezas y fresas.
  • Maridaje:  es un acompañamiento versátil que se adapta a una variedad de platillos. Desde ensaladas frescas hasta platos de pescado y mariscos, este vino rosado realza los sabores de diversas comidas.

Hasta aquí por hoy y ya nos saludaremos la próxima semana.

Hasta entonces, salud.

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