Por Aline Gómez  Roy

Octubre es mundialmente reconocido como el mes de la Concienciación sobre el Cáncer de Mama, un tiempo dedicado a aumentar la visibilidad sobre esta enfermedad, promover la detección temprana y apoyar a las personas afectadas.

En las últimas décadas, se ha investigado y demostrado el impacto positivo del ejercicio en las pacientes con cáncer de mama, tanto durante como después del tratamiento. La actividad física ayuda a reducir los efectos secundarios del tratamiento y puede disminuir el riesgo de recurrencia. Varias mujeres deportistas sobrevivientes han utilizado el deporte como parte de su proceso de sanación.

La historia de las mujeres en el deporte y su lucha contra el cáncer de mama está marcada por valentía, superación y el poder de utilizar el deporte como una herramienta para enfrentar esta enfermedad. A lo largo de los años, varias deportistas han sido diagnosticadas con cáncer de mama, y su experiencia ha influido tanto en el deporte como en la conciencia pública sobre la enfermedad. Así que hablemos de algunas de ellas:

Hablemos de mujeres y de deportistas sobrevivientes del cáncer de mama

En el pasado, tanto el deporte femenino como el cáncer de mama enfrentaban barreras culturales y sociales. Las mujeres en general no tenían el mismo acceso al deporte que los hombres, y el cáncer de mama se mantenía como un tema tabú del que pocas personas hablaban abiertamente. Las deportistas no solían compartir públicamente diagnósticos de enfermedades graves, incluido el cáncer, debido al temor de ser marginadas o que sus carreras se vieran afectadas.

A medida que las mujeres ganaron más espacio en el ámbito deportivo, comenzó a haber más historias de luchas personales, incluida la batalla contra el cáncer de mama. Aunque no había muchas deportistas que compartieran sus experiencias abiertamente, la visibilidad de las mujeres en el deporte empezó a aumentar.

Un caso destacado es el de la tenista Martina Navratilova, quien en 2010 anunció que había sido diagnosticada con cáncer de mama. Navratilova fue una de las primeras deportistas de alto perfil en compartir públicamente su diagnóstico, lo que contribuyó a una mayor conciencia sobre la importancia de la detección temprana. Su ejemplo ayudó a romper barreras de silencio alrededor del cáncer de mama y animó a otras mujeres a ser vocales sobre su salud.

Así que hablemos de otras mujeres que han enfrentado esta enfermedad:

1. Luz María Doria (Triatleta): Luz María, sobreviviente de cáncer de mama, es conocida por su participación en maratones y triatlones. Ha utilizado su experiencia para apoyar a otras mujeres y promover la importancia del ejercicio y la prevención.

2. Edna Campbell (Baloncesto – WNBA): Campbell, una jugadora de la WNBA, fue diagnosticada con cáncer de mama en 2002. A pesar de su diagnóstico, continuó jugando al baloncesto mientras recibía tratamiento, y más tarde se convirtió en una portavoz para la detección temprana y la investigación sobre el cáncer de mama.

3. Shannon Miller (Gimnasta): Aunque Miller es más conocida por haber ganado múltiples medallas olímpicas, en 2011 fue diagnosticada con cáncer de ovario, lo cual la convirtió en una activista de la salud femenina. Aunque su diagnóstico no fue de cáncer de mama, su caso es relevante por la lucha contra el cáncer en general, sirviendo de inspiración para muchas mujeres.

4. Chaunte Lowe es una atleta estadounidense especialista en salto de altura. Lowe, ganadora de dos medallas olímpicas, fue diagnosticada con cáncer de mama en el 2019. Pese a ello, la atleta no se rindió, superó la enfermedad y, a sus 37 años, participó en los Juegos de Tokio tan solo dos años después.

5. Williams-Mills notó un bulto en su pecho antes de viajar a los Juegos de Londres 2012. Sin embargo, la atleta jamaicana decidió competir y se alzó con un bronce en la prueba de relevo 4×400. La atleta tuvo que pasar por quirófano y venció un cáncer que reapareció tres años después. Williams-Mills sufrió una agonía que obtuvo su recompensa ya que en 2016 disputó unos nuevos Juegos totalmente curada del cáncer.

Estas mujeres han enfrentado el cáncer de mama y han demostrado que, a pesar de los desafíos, es posible seguir adelante y mantenerse activas. Su valentía no solo ha marcado la diferencia en sus vidas, sino que ha dejado un legado de superación y esperanza para otras mujeres.

 La copita de la semana

• Vino tinto Península Espaldera
• Región:  Valle de Guadalupe y San Vicente, Baja California, México
• Uva: Sangiovese y Aglianico
• Vista: Color rojo sangría con ribete violeta.
• Nariz: Aromas de frutos rojos y negros maduros, frutos secos.
• Boca:  complejo y equilibrado.
• Maridaje: Atún, salmón, frutos de mar con salseo intenso, cortes no grasos y quesos medios

Hasta aquí por hoy y ya nos saludaremos la próxima semana.

Hasta entonces salud.