Por: Julieta E. Libera Blas.
“Los barrios que han sido rescatados,
son como almas que han sido arrebatadas de las llamas del
infortunio.”
Autor desconocido.
Queridas y amables lectores:
Hace algunos días nuestro viaje por la calle Regina quedó suspendido por algunas situaciones complicadas que me impidieron estar como cada miércoles en esta Hoja en blanco pero heme de vuelta con ustedes para narrarles lo esplendorosas que son algunas de nuestras calles llenas de bullicio, historia, aglomeraciones y demás rarezas que nos hacen amarlas o pensar más de una vez en ir a dar la vuelta por lares tan pedregosos…
Esta vez y llena de emoción les comparto la maravilla del Museo Hospital Concepción Béistegui que se encuentra ubicado en la calle de Regina no. 7 del Centro Histórico de la Ciudad de México en la Delegación Cuauhtémoc.
Este hermoso inmueble fue parte del convento de las monjas concepcionistas en el siglo XVI y dejó de serlo una vez que las Leyes de Reforma se llevaron a cabo, así que pasó a manos de particulares. Su dueña fue María Concepción Máxima Béistegui y García pero, ¿quién fue esta mujer que ha benefició a tantas personas?
Doña Concepción Béistegui nació en el estado de Guanajuato en 1820, fue miembro de una familia aristocrática, aunque no hay demasiada información acerca de su vida, se sabe que tuvo varios actos de misericordia hacia los más necesitados. Ella fue la última dueña de esta hermosa edificación. El día 5 de septiembre de 1873 murió destinando su fortuna a obras de beneficencia privada, y a la caridad. Después de su muerte parte del Convento de Regina Coeli fue remodelado para ser acondicionado como hospital; durante algún tiempo se destinó para la atención exclusiva de personas de bajos o nulos recursos así como menesterosos. Dueña de un alma noble se sabe que doña Concepción Béistegui pagó la renta de las religiosas expulsadas de sus conventos durante la Reforma, así como otros actos bondadosos.
La Lotería Nacional en 2021 le dedicó el Billete del Sorteo Superior el cual no sólo conmemoró el bicentenario de su natalicio sino también la memoria de esta gran mujer mexicana y filántropa que sentó las bases de los hospitales del siglo XX.
En su testamento se puede leer:
“Yo María Concepción Máxima Béstegui y García, católica por gracia de Dios y doncella por su benevolencia, teniendo solo parientes ricos no requieren de mi pecunio, lego mi alma a Dios y mis bienes a los pobres.”
Datos Curiosos…
En la cláusula no. 13 de su testamento dispuso que se fundara un hospital en la calle de Regina no.7 en lo que fuera parte del Convento de Regina Coeli (1753-1863). Recordemos que las monjas que lo habitaban fueron expulsadas en 1863 por Juárez, reinstalándose durante el Imperio de Maximiliano para de nuevo ser expulsadas en noviembre del mismo año. Juárez entregó el convento al ejército hasta que fue entregado a particulares, su última dueña fue Doña Concepción.
Hospital Concepción Béistegui
El día 20 de marzo de 1886 el Hospital Concepción Béistegui fue inaugurado, según el periódico El Siglo Diez y Nueve, a las once en punto por el entonces presidente Porfirio Díaz. Al inicio la atención médica era impartida por médicos renombrados como el oftalmólogo José María Vértiz y pasantes que obtenían experiencia en su servicio profesional. Ahí se practicaron los primeros estudios de laboratorio y de Rayos X. Dentro de sus instalaciones incluían: salas, quirófanos, lavandería, cocina, despensa y administración, hasta la fecha de hoy se ignora si contaba con alguna botica. Al inicio operaba para la atención de hombres y mujeres por separado sin importar sus enfermedades, con el tiempo esto cambió. También existía una sala exclusiva para pacientes que pudieran pagar las consultas o su estadía en el hospital.
¿Cuáles eran los padecimientos y enfermedades que trataban?
- Enfermedades hepáticas, gástricas, infecciones crónicas, desnutrición, cáncer, tifo, influenza española, epilepsia, alcoholismo, enfermedades venéreas, cálculos biliares, cataratas y demás padecimientos.
Este inmueble fue ocupado por diversas instituciones:
- Cruz Roja Mexicana (1916-1934)
- Industria Azucarera y Similares.
- Gremio de Cañeros de San Cristóbal, Veracruz.
- Asegurados del IMSS y del ISSSTE.
Datos curiosos:
- En 1928 el hospital se convirtió en una institución privada.
- Durante la Revolución Mexicana en 1910 el Hospital se encontraba en condiciones precarias y fue hasta 1927 que se decidió crear un patronato.
- El primer patronato fue conformado por los médicos: Atanasio Garza, Daniel Gurría, Mauro Villaseñor y el antiguo gobernador del Estado de México Gustavo Baz.
- Todas las ambulancias salían por la Segunda Calle de San Jerónimo.
El Hospital cierra sus puertas
Sabemos bien que todo tiene un ciclo y tristemente el Hospital Concepción Béistegui en 1984 después de 98 años de funcionamiento y de haber probado distintos tipos de actividades externas y seguir recibiendo donativos, cerró sus puertas pues era imposible seguir manteniéndolo. Tres años después se convirtió en un asilo dirigido por la Fundación para ancianos Concepción Béistegui que se encuentra funcionando hasta el sol de hoy.
Para el año 2015 la fundación decidió dividir el inmueble en asilo y museo de sitio, éste exhibe distintos objetos y documentos históricos que abarcan los años de 1888 a 1916: asistencias médicas, admisiones, ingresos al hospital, expedientes clínicos. En una de las salas están expuestos los equipos médicos y quirúrgicos con cuatrocientos instrumentos.
Se puede apreciar que atendían pacientes provenientes de distintos lugares de la República Mexicana así como algunos españoles e italianos.
Dato curioso: algunos archivos fueron encontrados en óptimas condiciones a pesar del polvo y con algunos dobleces ya que estaban amarrados con mecates.
Este lugar me recuerda mucho a la paz que se encuentra debajo de los árboles que cubren la pequeña plaza de la calle Regina. Dentro de lo que fue este hospital en la planta baja se encuentra el café Jekemir, no sé si se pueda apreciar dentro de éste el pasar de los siglos, sólo sé que el aroma del café me hace pretender pensar en lo que hace siglos era este lugar. Lleno de encanto, de maravilla, de ecos fantasmales que alguna vez tuvieron voz. En mi última parada en la calle Regina, recorreré este laberinto cultural que se cubre con el bullicio de la gente que aprieta el paso o camina con cierta libertad, apreciando su andar, abrazando su tiempo.
Hace tiempo cuando vi con embeleso la película Santa con Lupita Tovar y Carlos Orellana (Compañía Nacional Productora de Películas, 1932) admiré su belleza y encanto de cada escena, sin éxito o poca habilidad de mi parte al investigar, no he encontrado datos del hospital en donde Hipólito llega con su lazarillo para acompañar a Santa en las que serían sus últimas horas de vida. Siempre imaginé que se trataba del hospital Béistegui pero ahora no estoy segura pues se menciona en su ficha técnica que fue filmada en el pueblo de Chimalistac.
Todo un escenario es la calle Regina, todas las historias y cafés no bastarían para abarcar tanta belleza. Así como todas las risas y confidencias. Todos los archivos históricos que existen no podríamos leerlos concienzudamente porque lo que nos falta es vida no tiempo. Yo les invito a apreciar con férrea curiosidad esta calle con toda la carga histórica que nos obsequia.
Gracias por sus lecturas y sean dichosos.
Fuentes de apoyo:
- guiadearchivos.adabi.org.mx, Archivo Histórico del Hospital Concepción Berástegui, Ciudad de México, 2020.
- mexicocity.cdms.gob.mx.Museo Hospital Concepción Béistegui
- radioformula.com.mx. ¿Quién fue Concepción Béistegui, la mexicana cuyo rostro aparece en los nuevos billetes de Loteria Nacional? Dayana Alvino, 2021.


